Abogados especialistas en accidentes laborales en Tenerife

Cuenta con nuestros abogados laboralistas en Tenerife para cualquier asunto relacionado con accidentes laborales

Durante el desarrollo de nuestra vida profesional es posible sufrir distintos tipos de accidentes laborales, que son aquellos que se producen durante el desempeño de la actividad laboral o a causa de ella (enfermedades profesionales), provocando una lesión de cualquier tipo en el empleado. Se relacionan de forma directa con el desempeño de su empleo, incluyéndose, en este apartado, los accidentes que ocurran en el trayecto hacia el puesto de trabajo o de vuelta a casa (accidentes in itinere).

Una forma de definir qué se considera accidente de trabajo es valernos de algunos ejemplos. Así, se consideran accidente de trabajo los accidentes de tráfico de camino a la oficina, y también una depresión relacionada con un ambiente laboral nocivo (que puede entenderse como enfermedad profesional), enfermedades profesionales físicas derivadas del uso de la maquinaria de la empresa o de la exposición a detenidas sustancias, cortarse o hacerse daño mientras se usan herramientas de trabajo, etc.

También entran en esa categoría las patologías previas que se vean empeoradas debido al desempeño del trabajo, así como las enfermedades intercurrentes, que son las que tienen su origen en complicaciones de un proceso patológico provocado por un accidente de trabajo, o las que tienen su origen en afecciones adquiridas en el nuevo medio en que se haya situado el paciente para su curación.

¿Has sufrido un accidente laboral? Nuestro despacho de abogados en Tenerife se encargará de hacer valer tus derechos como trabajador.

En resumen, lo son todas aquellas enfermedades que guardan relación con el desempeño de las funciones laborales encomendadas durante la producción del trabajo. Adquieren más importancia si, además, el empresario no ha adoptado las medidas necesarias en materia de prevención de riesgos laborales.

Por el contrario, no son accidente de trabajo los debidos a negligencias del trabajador. Tampoco serán accidente de trabajo los debidos a la imprudencia temeraria del empleado.

Hay que tener en cuenta que determinados puestos de trabajo son más susceptibles de provocar siniestralidad o presentan unos riesgos laborales más elevados. Además, los trabajadores autónomos también tienen derechos en materia de accidentes de trabajo. En estos procesos suelen intervenir las mutuas de accidentes, asociaciones privadas de empresarios que colaboran en la gestión de las contingencias de accidente de trabajo y enfermedad profesional.

Ten en cuenta que existe un plazo para interponer la demanda por accidente laboral: el plazo para reclamar por negligencia y solicitar la indemnización es cuestión controvertida en la jurisprudencia, entendiéndose por algunos aplicable la de responsabilidad Civil (6 meses) y, por otros, la de un año (propio de la jurisdicción Social). En cualquier caso, dada la complejidad de la materia, se hace aconsejable actuar lo antes posible, sin esperar al final, y hacerlo de la forma más organizada posible.

El punto de partida para iniciar dicha reclamación es el alta médica o la declaración de incapacidad permanente. Y es que sin conocer el alcance de los prejuicios no puede cuantificarse el daño y, por tanto, no se puede reclamar con pleno conocimiento. La estabilización de la lesión es clave para determinar este punto de partida.

Si has sufrido cualquier tipo de accidente relacionado con tu trabajo o daño laboral, contacta con nuestros abogados especialistas en accidentes laborales en Tenerife.

Reclamar indemnización por accidente laboral

Los derechos del trabajador te protegen ante situaciones de daño a tu salud provocadas en el curso de tu vida laboral que puedan determinar, entre otras cosas, una baja médica. Por eso existen indemnizaciones por accidente laboral que puedes reclamar de la mano de abogados laborales.

En algunos casos, y en función de la responsabilidad de la empresa en el accidente o enfermedad profesional, puedes tener derecho a una indemnización por daños y perjuicios adicional, en virtud del grado de responsabilidad del empresario.

Estos accidentes también pueden suponer para la empresa sanciones por responsabilidad administrativa, al no contemplarse la normativa propia para la prevención de riesgos laborales. Un ejemplo es el llamado recargo de prestaciones, que se relaciona con carencias en las medidas de seguridad y prevención de riesgos laborales que le corresponden al empresario. Por este concepto es posible que el empresario tenga que pagarte entre un 30 y el 50 por ciento adicional al de la prestación por incapacidad que percibas, ya sea temporal o incapacidad permanente.

También es posible que tengas derecho a mejoras recogidas en el convenio colectivo aplicable a tu profesión o empresa, o que puedas reclamar por responsabilidad civil, como ocurre en el sector de la construcción. Si la negligencia de la empresa es lo suficientemente grave, puede ser necesario emprender acciones penales, más allá de la legislación laboral. Lo mejor es que contactes con un abogado especialista en reclamar indemnización por accidente laboral.

Además de las indemnizaciones por accidente laboral, puede que tengas derecho a una prestación por incapacidad laboral, en virtud de la gravedad y de si se ha mermado tu capacidad para trabajar. Esta incapacidad esta podrá ser temporal o permanente en función de la gravedad del caso y de la duración de sus secuelas, así como de hasta qué punto éstas te impidan ejercer tu profesión habitual u otras. En ese caso, es probable que se abra otro frente de interés ante la Seguridad Social.

Además, no olvides que en estos casos es imprescindible y necesaria la actuación de un abogado especializado que defienda tus intereses. En nuestro despacho de abogados en Tenerife somos especialistas en el reconocimiento de accidentes laborales de todo tipo y sus indemnizaciones, así como su tramitación ante autoridades laborales, aseguradoras y órganos judiciales (juzgado laboral).

Te ayudamos a reclamar tu indemnización por accidente laboral